domingo, 27 de septiembre de 2015

Para empezar la semana



"Si te mantienes en calma e intensamente concentrado, llevarás a cabo todos tus deberes con la rapidez apropiada. El arte de la verdadera acción consiste en ser capaz de actuar lenta o rápidamente, pero sin perder la paz interior. El método adecuado consiste en establecer una actitud controlada, en la que puedas desempeñar tus actividades con paz, sin perder tu equilibrio interior. (...) Ya sea que trabajes lentamente o con rapidez, abriga la certeza de hacerlo siempre desde el centro de la serenidad.

Abre la puerta de tu calma y permite que los pasos del silencio se adentren suavemente en el templo de tus actividades. Realiza todas tus obligaciones con serenidad, saturado de paz.

La felicidad reside en darte tiempo para pensar y practicar la introspección. Recógete en soledad, de vez en cuando y permanece más tiempo en silencio. (...) A través de los portales del silencio, el sol bienhechor de la sabiduría y de la paz iluminará tu existencia."

"La paz interior, El arte de ser calmadamente activo y activamente calmado". Paramahansa Yogananda

jueves, 10 de septiembre de 2015

Los libros y la vuelta al cole







Hoy, día de vuelta al cole, os dejo esta cita:


"—Libros, mi estimado teniente —subraya—. Míos o de otros, da igual... Basta con su agradable conversación para saber que a usted no le son ajenos. Y, volviendo al asunto de antes, nadie puede ser sabio sin haber leído por lo menos una hora al día, sin tener biblioteca por modesta que sea, sin maestros a los que respetar, sin ser lo bastante humilde para formular preguntas y atender con provecho las respuestas... Procurando que nunca se diga de él lo que Sócrates dijo de Eutidemo, aplicable a muchos de nuestros compatriotas: Nunca me preocupé de tener un maestro sabio, sino que me he pasado la vida procurando no sólo no aprender nada de nadie, sino también alardeando de ello." Arturo Pérez-Reverte, Hombres buenos.

¿Nos ponemos como objetivo para este curso fomentar el amor por los libros? ¿Empezamos cada uno en nuestro pequeño espacio a fomentar el respeto por los maestros? Y uno más, ¿colocamos a la EDUCACIÓN en el lugar que merece?


¡Feliz curso! ¡Disfrutar mucho!

domingo, 6 de septiembre de 2015

Un libro de vez en cuando: Hombres buenos


Acabo de terminar de leer el último libro de Pérez-Reverte: ¡Me ha encantado!

Ha servido para reconciliarme con el autor, a quién admiraba como escritor, siguiendo todas sus novelas y, lo más importante, como persona. En los últimos tiempos, la verdad que habían sido frustrantes los acercamientos a sus libros (que esperaba con la ansiedad que sentimos ante nuestros autores favoritos) como el último capítulo de Alatriste, el libro del Dos de mayo y alguno más que me llevaron a dejar de leerle.

Me anime a volver a intentarlo gracias a una entrevista que vi en televisión (no recuerdo el programa) y sus palabras me devolvieron a aquella persona que admiraba y a quién tuve ocasión de conocer en una charla impresionante que dio a un grupo de chavales, animándoles a leer.

La novela es magnífica en su estructura, con el sistema que ha utilizado de intercalar los momentos en los que iba documentado los escenarios de la historia y reconstruyendo a los personajes, con el desarrollo de la trama.

"Pero eso no ocurre sólo con libros ya escritos, sino también con libros por escribir, cuando es el propio viajero quien puebla los lugares con su imaginación. Eso me ocurre con frecuencia, pues pertenezco a la clase de escritor que suele situar las escenas de sus novelas en sitios reales. Pocas sensaciones conozco tan agradables como caminar por ellos con maneras de cazador y el zurrón abierto mientras una historia fragua en tu cabeza; entrar en un edificio, caminar por una calle y decidir: este sitio me conviene, lo meto en mi historia. Imaginar a los personajes moviéndose por el mismo lugar, sentados donde estás, mirando lo que miras. Comparada con el acto de escribir, esa fase previa es aún más excitante y fértil, hasta el extremo de que ciertos momentos de la escritura, su materialización en tinta, papel o pantalla de ordenador, pueden presentarse luego como acto burocrático y hasta ingrato."

Es amena, entretenida, divertida (son geniales las situaciones con los actuales académicos), con aventura y duelos (¡cómo los echaba de menos!) y, sobre todo, es un recorrido por el mundo de los valores, valores como la educación, la honradez, la bondad, la lealtad, el valor, el coraje... que cada día abundan menos.
Es un canto al diálogo, a la discusión filosófica, al pensamiento crítico, al valor de la educación y una crítica feroz al mundo de las apariencias, del dinero, de una política y unos políticos ineptos e incultos, a la mediocridad de los instituciones y a su utilización torticera.

"—Todos los recuerdos lo son... Todo lo vivido aprovecha, de una u otra forma. Excepto para los fanáticos y los imbéciles.(...)
Son los hombres inspirados los que iluminan al pueblo, y los fanáticos quienes lo extravían. Pero el freno que debe oponerse a los excesos de estos últimos no debe, en absoluto, coartar la libertad tan necesaria a la verdadera Filosofía."

El argumento nos sitúa en los tiempos previos a la Revolución Francesa, la Ilustración, en la que dos académicos de la Real Academia de la Lengua Española reciben el encargo de ir a París a comprar la Enciclopedia. A pesar de contar con la autorización del rey y un visto bueno relativo de la iglesia (formaba parte del Indice de libros prohibidos), la oposición a que el libro llegue a España, va a rodear la misión de los dos académicos de dificultades.
Es una novela histórica, plenamente actual. 





jueves, 3 de septiembre de 2015

Mirar dentro de ti: propósitos para septiembre



Fotografía tomada de: http://quehacerpara.net/wp-content/uploads/2014/09/MujerEspejo2.jpg


"Los grandes maestros de la India que han manifestado un vivo interés en el mundo occidental han comprendido plenamente las condiciones de la vida moderna en este hemisferio. Ellos saben que la situación mundial no podrá mejorar a menos que cada país llegue a asimilar profundamente las principales virtudes tanto de Oriente como de Occidente; cada hemisferio necesita de lo mejor que el otro puede ofrecerle. (...) En Oriente, el sufrimiento se manifiesta principalmente en el plano material mientras que, en Occidentes, es más aparente en los planos mental o espiritual. Pero es un hecho el que todas las naciones padecen de los doloroso efectos de una civilización desequilibrada. (...) Los males atribuidos a una abstracción antropomórfica llamada "sociedad" pueden ser desentrañados, más pragmáticamente, del interior de cada individuo. El ideal de una sociedad perfecta debe germinar primero en el seno de la vida privada y, sólo entonces, florecerá la virtud en la vida cívica; las reformas internas conducen 
de manera natural a las externas. En efecto, un hombre que se ha reformado a sí mismo reformará a miles",  (pág. 680 y siguientes, Autobiografía de un Yoguï, Paramahansa Yogananda, fotografía tomada de: www.yogananda.com.au/img/gurus_img/py1940-2.jpg).

Estas sabias palabras fueron escritas en el año 1945, ¿no le encontráis validez  en el 2015?
Podríamos pensar un poco cómo somos y cómo actuamos cada uno de nosotros y quizás entendamos algo cómo se comporta esa entelequia llamada "sociedad". Sólo mira a tu alrededor y, si te atreves, dentro de ti.